Un beso de miel de la Amazonía boliviana.

El achachairú (Garcinia humilis), vocablo guaraní que significa “beso de miel”,  es un árbol que crece en las llanuras aluviales de Bolivia. Sus frutos, cuyo sabor ofrece un perfecto equilibrio de dulzura y acidez, son un poco más grandes que una lima pero con la piel más gruesa, ovalados y de color pardo anaranjado y pueden disfrutarse frescos, en jugo, como helados, en licores o en mermeladas y dulces.

Considerada la fruta preferida en el oriente boliviano, en los últimos tiempos ha recibido especial atención por sus cualidades alimenticias y medicinales.  El achachairú tiene un bajo contenido en azúcar y es rica en antioxidantes, vitamina C, potasio, riboflavina y diversos estudios han identificado la presencia anticancerígenos en sus ramas. En la medicina tradicional boliviana, la corteza de la fruta y su miel se han utilizado durante siglos para tratar problemas como reumatismo, inflamación, transtornos gástricos y manchas de la piel.